¿Soy eyaculador precoz?

Muchos nos preguntamos: ¿qué es eyaculación precoz? ¿Soy eyaculador precoz?. Un problema difícil que analizamos en este artículo.


Resulta sorprendente lo mucho que ha evolucionado la sociedad: los progresos en la lucha por la igualdad de género, los avances tecnológicos, el acceso universal a la educación, los avances sanitarios, etc. Una evolución que, si bien nos ha permitido hablar con una mayor libertad de sexo, paradójicamente, no han conseguido que el sexo deje de ser un tema tabú.

En muchas ocasiones seguimos valorando la "hombría" en función de la cantidad y la calidad de relaciones sexuales. Un hombre es un hombre, un macho, muy macho, cuando es capaz de hacer estremecer a una mujer en la cama. Un concepto anticuado, por desgracia, todavía demasiado presente en nuestra sociedad pues, cuando la mujer no llega al orgasmo: llega el problema.

Si estás leyendo este artículo, es probable que sea porque el tema te afecta en primera persona, porque, con una relativa frecuencia, llegas tú al orgasmo antes que tu pareja y, es posible, que ella no llegue en algunas ocasiones (o que tu sientas que esto es demasiado frecuente). En este caso, lo más probable es que estés intentando averiguar el origen del problema, que estés intentando contrastar si tu duras o no "lo normal".

Seamos sinceros, el saber que estás dentro de la norma, no va a resolver tu problema, pues deseas complacer a tu pareja, pero sí puede que te tranquilice.

¿Qué es eyaculación precoz?

No es buena idea tratar de contrastar si eres o no eyaculador precoz en función del tiempo que tardas en llegar al orgasmo desde que se produce la penetración. De la misma manera que cuando estuvimos hablando del tamaño del pene y las estadísticas, vimos que la media es un tema matemático, cuando hablamos de tiempo medio de duración, nos introducimos en temas estadísticos no muy claros.

Según las conclusiones que podemos extraer del III Foro Nacional de Salud Sexual realizado en España, en cada país se utiliza un criterio de duración, un criterio que - como podemos observar - difiere bastante, así: en países como Turquía se considera que un tiempo medio de duración de la relación sexual en el hombre es de 3,5 minutos, en los países latinos de la vertiente mediterránea (España, Francia o Italia) este tiempo sería de 5,8 minutos (un incremento de un 166%) y en Inglaterra estaríamos hablando de 9 minutos (un 257% mas = casi el triple de tiempo).

Como podemos observar un criterio nada "normalizado" y que hace que pases de ser un superdotado a un rápido con solo cruzar el canal de la mancha.

En esto, como en casi todo, han intervenido los americanos (del norte) intentando normalizar la situación y crear un baremo aplicable a todos los países. Baremo este, aprobado por su clase médica y que establece cuatro pautas de tiempo:

• Duración deseable: Entorno a los 8 minutos.
• Duración adecuada: Entorno a los 4,91 minutos.
• Duración demasiado corta: 1,25 minutos o menos.
• Duración demasiado larga: 19,96 minutos o más.

En lo que afecta directamente a este artículo sí parece haber un acuerdo unánime, parece que los especialistas sí establecen un tiempo para el concepto de eyaculación precoz. Se considera que una persona sufre el denominado trastorno de eyaculación precoz cuando esta eyacula antes de 1 minuto tras la penetración.

Como comentábamos al principio de este punto este es un criterio que debe ser tomado con precaución: primero debemos considerar que estamos hablando de eyaculación precoz cuando la duración establecida es la frecuente, la habitual, no se puede considerar una eyaculación precoz a un suceso esporádico, segundo el tiempo descrito es orientativo, hay personas que llegan a la eyaculación incluso antes de producirse la penetración, en este caso - aún no ajustándose a la descripción - sí estaríamos en un caso de eyaculación precoz.

El problema de la eyaculación precoz radica en los sufrimientos psicológicos que esta puede producir en los hombres y, como rebote, en las mujeres.



Como comentábamos al principio del artículo, el tema fundamental que suele hacer que nos planteemos el problema de la eyaculación precoz es el de que nuestra pareja no alcanza el orgasmo con la misma frecuencia que nosotros. El problema es que nos está preocupando el no saber cómo hacer que nuestra pareja disfrute en la cama como nosotros.

Como Crecer El Pene

Te preocupa como crecer el pene. Existen diversas opciones en el mercado y aquí vamos a contrastarlas.

Suponemos que has decidido que tu miembro no tiene el tamaño que tú quieres y estás evaluando el modo de cambiarlo. Antes de tomar cualquier decisión te recomendamos que te informes de qué opciones existen y las sopeses. He aquí el objeto de este artículo.

Durante algún tiempo se consideró que los hombres preocupados por como crecer el pene, eran hombres con pocas "miras",  hombres simples que no disponiendo de ningún otro argumento consideraban que el tamaño de su miembro les daría la hombría que no tenían.

Por suerte, esa percepción se está quitando. Los hombres y las mujeres han aprendido que deben cuidar su cuerpo, que su cuerpo es una carta de presentación ante los demás y, por ello, no es raro encontrar personas que intentan mejorar alguna parte de su cuerpo.

Cuando la naturaleza no nos ha dotado del cuerpo que queremos, es de ley que intentemos cambiarlo para amoldarlo a lo que nosotros queramos reflejar con él. De igual manera que las mujeres buscan la manera de marcar la cadera, modificar el tamaño de sus senos, enderezar su nariz, etc., igual lo hacen los hombres.

Pero los hombres tienen una parte que no tienen las mujeres y, por tanto, son los únicos que están interesados en como crecer el pene, en como agrandar el miembro, o enderezarlo, o engrosarlo, etc.


Como Crecer el Pene por interinoansioso

Opciones en Como Crecer el Pene

Actualmente, existen muchas formas de hacer de crecer el pene. Cada una tiene sus ventajas e inconvenientes, las analizamos:

• Quirófano
  Gracias a los avances médicos, actualmente es posible modificar quirúrgicamente el tamaño y forma del miembro. Esos avances permiten incluso poner un miembro en personas que nacieron con el sexo equivocado.
  Este método - de resultados inmediatos - tiene algunos inconvenientes que no se pueden despreciar como son: el que salvo casos muy especiales en los que la cirugía es la única solución, no suelen estar cubiertos por el sistema de salud pública y, por tanto, hay que pagarlos y están fuera del alcance de la mayoría; una operación es siempre una operación y, aunque la medicina ha avanzado mucho, no están exentas de riesgos; el postoperatorio existe, los cortes, los puntos, las inflamaciones, el dolor, etc.


• Las pastillas y las cremas
  En este grupo incluimos todos aquellos productos naturales que resuelven nuestro problema de como crecer el pene.
  Pese a que no estamos diciendo aquí que estos sistemas sean peligrosos para nuestra salud, si debemos tener claro que este tipo de productos no pasan los rigurosos sistemas de control sanitario de los productos farmacéuticos (de las medicinas) y, por tanto, deben ser considerados con cautela.


• Las pesas y sistemas de tracción
  Algunos de estos sistemas están avalados por médicos colegiados, aún así debemos tener claro que son incómodos, de efectos a largo plazo y que sólo debemos elegir (si es que lo hacemos) el que más garantías nos proporcione (no el que ofrezca resultados más rápidos o mejores)


• Los métodos naturales de ejercicios
  Desarrollados durante siglos por distintas culturas, ofrecen una alternativa real a los sistemas anteriores para quienes buscan como crecer el pene.
  No necesitan del consumo de ningún producto y pueden realizarse en la intimidad de casa con el ritmo que marquemos nosotros.

En este artículo te hemos mostrado los distintos sistemas que existen para resolver la pregunta de como crecer el pene.
Como se observa todos los sistemas tienen sus ventajas e inconvenientes pero creemos sinceramente que sólo los naturales ofrecen un grado de riesgo menor y  nosotros queremos saber como agrandar el miembro para mejorar nuestra imagen pero no correr riesgos.

Disfuncion Erectil y Estres

El estrés y la disfunción eréctil son dos procesos que van de la mano. Deberemos aprender cómo manejar los problemas para que no afecten en la relación.


Recordemos las distintas fases por las que pasa la construcción de la mayoría de las parejas:

El cortejo: los juegos, insinuaciones, provocaciones, tanteos, etc. para conquistar y ser conquistados.

La luna de miel: conseguido nuestro objetivo, llegado el acuerdo mutuo de participar en la pareja, la pareja entra en esta fase en la que predomina el deseo constante de estar siempre juntos, una fuerza arrolladora nos invade y nada ni nadie puede romperla.

En este fase el sexo, el sexo es algo espontáneo e inevitable; la mera presencia de nuestra pareja hace que nuestra libido se dispare hasta su máxima expresión, somos como se suele decir “conejos en celo” cuyo problema no es la disfunción eréctil sino, en muchas ocasiones, cómo evitar la erección por ponernos en situaciones comprometidas al estar siempre erectos.

Pasada esta fase de luna de miel, llega la fase de ajuste en la que nuestra realidad vuelve a hacerse presente y esa furia desbocada va relajándose.

En esta situación las preocupaciones, el estrés tiende a apoderarse de nosotros, como suele decirse “tenemos la cabeza en otro lado”; los problemas nos impiden centrar nuestra atención en nuestras sensaciones, invaden nuestra existencia y el deseo que nos unía decae.

De alguna manera, hemos permitido que los problemas de la vida entren en nuestro círculo privado de pareja, se adueñan de la parcela de la libido, cae el deseo sexual y, con él, vienen los problemas de erección: La disfunción eréctil.

Veamos qué podemos hacer para evitar la

Disfunción eréctil por estrés

Centrando la mente y el cuerpo.

Cuando tenemos la mente ocupada intentando planificar como organizar el tiempo para simultáneamente, poner la lavadora, preparar la cena, pasear al perro y repasar el informe de la mañana, es muy difícil que la mente sea consciente –además- de nuestra sensación física.

Lo primero que debemos hacer pues es centrar nuestro cerebro, reconocer que es importante escuchar a nuestro cuerpo, abrir un paréntesis, priorizar. Debemos aprender a relajarnos y dejarnos llevar, dejar que las cosas transcurran.


Centrase en las sensaciones.

De la misma manera que cuando éramos más jóvenes y no disponíamos de lugar ni tiempo definido para nuestras relaciones, de la misma manera que en ese momento nos estresaba y afectaba la sensación constante de peligro, de temor a ser descubiertos; de la misma manera que ahora, que ya tienes ese lugar, una llamada telefónica, una visita inesperada de los niños, etc. puede hacer que se corte la pasión; de la misma manera ocurre con los pensamientos.

Cuando estemos en la relación, debemos permanecer lo más entregados posible, centrar todos nuestro sentidos en sentir y hacer sentir.

Si en ese momento nos afecta un pensamiento “inconveniente”, la opción no es intentar forzar que nuestra mente no atienda este pensamiento (paradójicamente cuanto más intentamos obligarnos a no pensar en algo más pensamos en ello); la opción es reconocerlo, saber que está ahí y apartarlo para otro momento, volviendo a centrar la mente en aquello en lo que debe estar, que no es otra cosa que en sentir.


Respeta tu cuerpo.

Ya sabemos que cuando estamos estresados, los nervios atenazan el cuerpo, no descansamos lo suficiente y el mismo estrés consume nuestro cuerpo y nuestras energías. En estas circunstancias es muy habitual recurrir a sustancias estimulantes para recuperar las energías perdidas y, además, unir este consumo al de sustancias relajantes para reducir el nivel de nerviosismo; recurriremos frecuentemente al alcohol, el café, el tabaco, las pastillas de valeriana, etc.

Un coptel que no nos va a ayudar a mejorar nuestro estado general de estrés (sólo conseguiremos beneficios momentáneos) pero sí va a afectar a largo plazo en: primero incrementar nuestro nivel de estrés y segundo la calidad de nuestras erecciones.

Para combatir estas situaciones no podemos recurrir a sacrificar nuestro cuerpo y nuestra salud. Recursos más naturales y beneficiosos que nos ayudarán tanto o más serán: dar largos paseos, realizar ejercicios de relajación y respiración, conversar de modo distendido y ... centrar nuestra mente en recuperar nuestra sexualidad.


Rutina de desconexión.

Al entrar en casa todos tus problemas desaparecen, la puerta se cierra y todos tus problemas quedan detrás. Estás en tu hábitat, estás en tu lugar protegido y ningún problema puede franquear esa puerta. Los problemas quedarán fuera, esperando a que los recojas mañana cuando salgas.

Este razonamiento es bonito pero, por desgracia, frecuentemente imposible. Los problemas nos acompañan y resulta difícil dejarlos a conveniencia.

En el caso de la disfunción eréctil por problemas de estrés resulta frecuentemente muy útil el crear una rutina de desconexión en pareja; tu pareja es tu apoyo, tu pareja es tu compañera en tu recuperación; creemos rutinas para introducirnos en la relación y desconectar de los demás asuntos; una cena intima y afrodisiaca, un baño espumoso en pareja, un masaje relajante y sensual, etc.


El momento es ahora

Buscando, buscando, tenemos el peligro de nunca encontrarnos. Si buscando el momento ideal para el encuentro nos damos cuenta que nunca llega, que siempre lo postergamos pues antes debemos atender tal o cual cosa, estamos dilatando el problema.

La disfunción eréctil por estrés en un problema precisamente porque las relaciones sexuales son tanto o más importantes que el resto de tus actividades diarias. No las posterguemos como la última en prioridad y démosle el lugar que merece en nuestra lista de prioridades.



La calidad en la relación sexual es un pilar de la autoconfianza y de la relación de pareja. No dejemos que estas se deterioren por un problema con solución. Te recomendamos que practiques lo expuesto en el artículo y verás como en poco tiempo aprenderás a evitar que el estrés entre en tu intimidad y se produzca la temida disfunción eréctil.

Deseo Sexual y Disfuncion Erectil

Tienes problemas de erección, la conocida disfunción eréctil y se une una caída del deseo sexual. La caída del deseo sexual no es exclusiva de los hombres. Veamos como corregirla.


Tras la primera fase por la que atraviesan las parejas, tras esa primera fase de fogosidad y de deseo constante, tras esa fase en la que la mera idea de imaginar a tu pareja bastaba para que tu cuerpo rugiera pidiendo “relaciones”, lamentablemente suele seguir una fase de “atenuación”.

Cuando antaño teníamos la libido totalmente disparada y nuestras erecciones surgían esplendorosas a la más mínima insinuación, ahora vemos como esta fuerza ha desaparecido, una especie de rutina monótona se ha apoderado de nuestro deseo sexual y hace que cada vez esté más apagado.

No es un problema exclusivo de los hombres, esta monotonía afecta tanto a hombres como a mujeres pero, mientras que en las mujeres se manifiesta con una pobre disposición a la relación sexual, en los hombres tiene su prueba exterior en los problemas de erección, nos cuesta mantener (incluso que se produzca) la erección; es la temida disfunción eréctil.

Ambos miembros de la pareja hemos permitido que la rutina se adueñe de la relación, nos hemos acomodado y esta relajación ha tomado preso nuestro deseo sexual. Las relaciones sexuales son muy importante en toda relación, debemos contraatacar para recuperar el deseo, la pasión y la sexualidad en la pareja, veamos

Caminos al Deseo Sexual

Revivir el deseo apagado es una tarea importante para la pareja y para nosotros mismos. Una buena salud sexual repercute de manera muy beneficiosa en nuestra autoestima y en nuestra salud física.

Podemos pensar que padecemos un problema de disfunción eréctil y este es el que nos está bajando la libido aunque, probablemente, sea al contrario, que sea la caída del deseo sexual la que esté trastornando nuestra erección y produciéndonos la disfunción eréctil.

Para evitar una y otra bastará con seguir una serie de pasos sencillos:


No existe culpable

El enfriamiento de la relación es un proceso habitual, si bien es cierto el dicho “mal de muchos, consuelo de tontos”, el hecho es que se trata de un proceso frecuente.

Buscar culpables es inútil, culpabilizar a la pareja es injusto, culpabilizarnos a nosotros es frustrante, lo único que debemos hacer es aunar esfuerzos con nuestra pareja para resolver la situación.

Debemos ser conscientes de que sólo nos interesa el resultado: recuperar el deseo para resolver nuestras alteraciones de erección. Remar junto a nuestra pareja resultará, además de mucho más estimulante, un paso en reforzar nuestra relación.


El efecto Sorpresa

La monotonía es un gran enemigo de la pareja. Debemos recuperar la chispa de la relación, volver a sorprender con detalles que renueven la ilusión.

Siguiendo la opinión de los sexólogos una técnica que suele resultar muy útil es la de reencontrar a nuestra pareja en un ambiente distinto al normal: podemos preparar un picnic en algún parque cercano, podemos planear una excursión, una cita en algún lugar en el que no hayáis estado nunca ninguno de los dos (y acudir por separado),etc.


Ser afectuoso no es un defecto.

El romanticismo ha muerto ¿realmente lo pensáis? ¿Lo comparte tu pareja?

Los besos, los abrazos, etc. todos esos signos de afecto con los que prodigáis a vuestros seres queridos, también son necesarios en la pareja. No podemos permitir que la monotonía se implante en nuestra relación.

En el caso de una pareja estos actos de cercanía deberían verse acentuados con caricias, roces, miradas cómplices, palmadas, etc., la proximidad física es una gran ayuda en la recuperación del deseo sexual.


Mente abierta

Aprendamos a observar a nuestra pareja fuera de la misma pareja.

Si nos fijamos en la pareja, en otros contextos, descubriremos que es una persona independiente que tiene su propia identidad, sus propias inquietudes, intereses, aficiones, etc.

Redescubrir a nuestra pareja fuera del ambiente intimo, observar su independencia y el hecho de que quiera estar junto a nosotros volverá a renacer el deseo por tener aquello que, aunque teníamos nos habíamos habituado y no valorábamos.



Revivir el deseo en la pareja resolverá muchos de los problemas de erección que achacábamos a agentes externos. Resuelta nuestra disfunción eréctil y recuperado el deseo sexual, es el momento de volver a disfrutar y a hacer disfrutar de esta nueva condición sexual.

Cómo Agrandar El Miembro Masculino

Agrandar el Miembro Masculino es posible. Sin cirugía ni cosas extrañas. Sólo con tu constancia puedes agrandar tu miembro en longitud y grosor.


Durante mucho tiempo nos han estado diciendo que el intentar averiguar como crecer el pene era una prueba de nuestra falta de inseguridad, que lo importante no es el tamaño sino la manera en que utilizamos nuestro miembro y que las mujeres no valoran el tamaño del miembro.

La realidad es bien distinta: las mujeres SÍ valoran el tamaño del miembro y, lo que es mucho más importante: tener un tamaño de miembro con el que no estamos conformes genera mucha insatisfacción.

Así el que muchos hombres busquemos Como Agrandar El Miembro Masculino, es normal, lógico y comprensible. No somos personas débiles, muy al contrario: somos personas decididas que al encontrar un problema buscamos la manera de solucionarlos. Buscamos la clave principal de una buena existencia, el sentirnos cómodos con nuestro físico, en concreto, con el tamaño de nuestro pene y, para ello, necesitamos saber Como Agrandar El Miembro Masculino.

Conocedores de esto que para muchos es una necesidad, las grandes empresas nos han intentado hacer creer que crecer el pene sólo es posible mediante alguno de los dos caminos que ellas representan: El primero sería la cirugía, que pone en peligro nuestra salud, que siempre resulta traumática y, lo que a ellos más les interesa, que es un proceso muy caro; la segunda opción se basa en que compremos y utilicemos las pastillas y cremas que nos proponen, unos productos estos que no se comercializan por las vías sanitarias tradicionales puesto que no han pasado los controles que se exigen, luego unos productos que deberemos consumir o utilizar durante mucho tiempo (gastando mucho dinero) y que - seguramente - no nos darán el resultado que queremos.

Las grandes empresas quieren ganar dinero con la necesidad que muchos tenemos en averiguar Como Agrandar el Miembro Masculino. Puesto que tienen un interés económico, necesitan que gastemos mucho dinero en sus productos y, por ello, ocultan la realidad demostrada: Podemos conseguir Agrandar el Miembro Masculino en longitud y grosor con SIMPLES EJERCICIOS.


Así de simple, como lo oyes: agrandar el miembro masculino es posible sólo recurriendo a ejercicios específicos. No es ningún descubrimiento de este blog, es un conocimiento que han desarrollado muchos pueblos distintos, un sistema - por tanto - muy demostrado y que, sin embargo, nos intentan esconder pues supone conseguir agrandar el miembro desde la comodidad de nuestro hogar y sin hacerles el gasto que están buscando.

Veamos,

Como Agrandar el Miembro con Ejercicios

Aunque cada uno de los pueblos de los que hemos hablado anteriormente tenía sus propias técnicas y "secretos", podemos aunar sus conocimientos en los que resultan más productivos y eficientes para la mayoría de la gente.

Calentamiento.

Para comenzar, pensemos que vamos a realizar un ejercicio físico, vamos a someter a nuestro cuerpo a un esfuerzo y, para evitar lesiones, deberemos realizar un calentamiento previo.

Cuando vamos a empezar a realizar algún deporte deberemos comenzar por calentar: unas carreras cortas, unos ejercicios de distensión y calentamiento de articulaciones, etc. , en el caso de la práctica que vamos a realizar ahora, el calentamiento se realizará envolviendo el pene en un paño mojado en agua tibia durante aproximadamente 10 minutos. Recordar que esta fase es importante para evitar lesiones.

Alargamiento.

En el crecimiento del pene tendremos dos partes, por una parte querremos aumentar el tamaño del pene en longitud (es lo que vemos ahora) y por otra en grosor.

Para realizar los ejercicios de alargamiento es necesario que el miembro se encuentre en estado de "semi-erección", esto es: no podemos realizar los ejercicios con el pene flácido (si queremos resultados), ni podemos hacerlos con el pene erecto (en este caso podemos producir lesiones), lo ideal es una erección de aproximadamente el 50%.

En este estado de erección, los ejercicios tendentes a crecer el pene en longitud se basarán en estiramientos; cogeremos el pene de forma que sintamos cómoda y estiraremos del mismo hacia adelante hasta notar una ligera molestia (remarcar: ligera), permaneceremos en esta posición unos 30 segundos para luego descansar durante otros 20, repetiremos 4 veces.

Además de los estiramientos hacia adelante deberemos realizar estiramientos laterales (a derecha e izquierda).

Engrosar.

En los ejercicios para aumentar el grosor del miembro masculino se precisa que la erección sea mayor que en los ejercicios de alargamiento aunque, como en el alargamiento, no se pueden realizar con el pene totalmente erecto, una erección buena rondaría el 75-80% de la completa.

Con esta erección cogeremos el pene desde la base con los dedos índice y pulgar haciendo como una especie de anillo, desde esta posición iremos avanzando hasta la punta del pene como exprimiendo la sangre hasta la punta.

Como en el caso del alargamiento, podemos sentir algo de molestia pero nunca hacernos daño.

Repetiremos esta operación de "ordeño" por lo menos cinco veces, siempre soltando desde la punta y volviendo a comenzar desde la base del pene.



El secreto del éxito de este tipo de ejercicios está en la correcta realización y en la constancia.