Existen muchos mitos sobre Cómo durar más en la cama. En este artículo analizamos los errores frecuentes y analizamos su solución.
Cuando hablamos de relaciones sexuales, uno de los problemas con los que se enfrentan los hombres con mayor frecuencia que las mujeres es el hecho de cómo durar más en la cama. Como conseguir durar el tiempo suficiente para poder hacer disfrutar a la mujer.
Si recorremos Internet o hablamos con amigos, descubriremos que existen muchos "métodos" para resolver este problema:
Todos los métodos que se han dicho antes es posible que surtan un efecto puntual que nos permitan superar la situación en un momento preciso, pero tienen el inconveniente que no nos permiten disfrutar de la relación sexual. Tener que recurrir a estas técnicas no resuelve el problema, fomentan nuestra desconfianza en nosotros mismos y, a la larga, empeoran en problema.
El problema de base es comprender que hombres y mujeres tenemos un ritmo sexual distinto.
Hasta ahora se consideraba que el hombre es el único obsesionado con el sexo, y que las mujeres consideran la relación desde otra perspectiva, valorando más otros valores. Un reciente estudio de la Universidad de Ohio demuestra que esto no es exactamente así.
El estudio en cuestión se realizó sobre una población universitaria de 283 estudiantes (hombres y mujeres) a los que se les proporcionó un pulsómetro para que lo activarán cada vez que pensaban en alguno de dos temas que entraban en el estudio: sexo, comida y sueño.
Del estudio se desprende que efectivamente los hombres piensan en sexo casi el doble de veces al día que las mujeres (19 veces los hombres frente a 10 las mujeres), pero también pone de manifiesto que si realizamos un estudio comparativo la diferencia no es tanta: los hombres piensan diariamente 19 veces en el sexo, 18 veces en comer y 11 en dormir frente a las 10 veces en sexo, 15 en comer y 8 en dormir que lo hacen las mujeres.
De este estudio podemos extraer dos conclusiones:
De lo anterior podemos desprender que el sexo es una parte importante en la relación en la que pensamos los dos sexos. Se acabó considerarnos "enfermos sexuales", proporcionalmente, los hombres y las mujeres valoramos casi igual el sexo en la relación.
Partiendo de esta base, tendremos resuelta la primera pieza del puzle: podemos llegar tranquilos a la relación sabiendo que nuestra pareja también la valora.
Nos planteamos cómo durar más en la cama por otro hecho, el hecho de que los ritmos sexuales son distintos, esto es: el hombre, fisiológicamente, tiende a excitarse con mucha mayor rapidez que la mujer.
Para una relación sexual plena y satisfactoria, es necesario que esta sea valorada por ambas partes. Debemos ser capaces de aumentar nuestra autoestima y comprender que podemos ser unos buenos amantes. Para saber Cómo Durar Más en la Cama, no debemos recurrir a los métodos expuestos al principio porque aumentarán nuestra inseguridad, harán que sólo con ellos sintamos que podemos "durar" y nos impedirán disfrutar de la relación.
En lugar de recurrir a estos trucos del pasado debemos mejorar nuestra relación sexual.
Si la mujer tiene un ritmo sexual más lento que el de los hombres, la solución no pasa por retardar el de los hombres sino por dedicar más tiempo al calentamiento de la mujer.
Cuando hablamos de relaciones sexuales, uno de los problemas con los que se enfrentan los hombres con mayor frecuencia que las mujeres es el hecho de cómo durar más en la cama. Como conseguir durar el tiempo suficiente para poder hacer disfrutar a la mujer.
Si recorremos Internet o hablamos con amigos, descubriremos que existen muchos "métodos" para resolver este problema:
- Recurrir al uso de cremas retardantes.
- Mantener nuestra mente ocupada en otras cosas mientras realizamos el acto.
- "Descargar" antes de estar con nuestra pareja.
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El problema de base es comprender que hombres y mujeres tenemos un ritmo sexual distinto.
Hasta ahora se consideraba que el hombre es el único obsesionado con el sexo, y que las mujeres consideran la relación desde otra perspectiva, valorando más otros valores. Un reciente estudio de la Universidad de Ohio demuestra que esto no es exactamente así.
El estudio en cuestión se realizó sobre una población universitaria de 283 estudiantes (hombres y mujeres) a los que se les proporcionó un pulsómetro para que lo activarán cada vez que pensaban en alguno de dos temas que entraban en el estudio: sexo, comida y sueño.
Del estudio se desprende que efectivamente los hombres piensan en sexo casi el doble de veces al día que las mujeres (19 veces los hombres frente a 10 las mujeres), pero también pone de manifiesto que si realizamos un estudio comparativo la diferencia no es tanta: los hombres piensan diariamente 19 veces en el sexo, 18 veces en comer y 11 en dormir frente a las 10 veces en sexo, 15 en comer y 8 en dormir que lo hacen las mujeres.
De este estudio podemos extraer dos conclusiones:
- Aunque el hombre piense más veces en el sexo que las mujeres estas también lo hacen mucho.
- Proporcionalmente, la importancia que da el hombre al sexo respecto a la mujer es parecida. Pensamos más en sexo pero también en comer y en dormir.
De lo anterior podemos desprender que el sexo es una parte importante en la relación en la que pensamos los dos sexos. Se acabó considerarnos "enfermos sexuales", proporcionalmente, los hombres y las mujeres valoramos casi igual el sexo en la relación.
Partiendo de esta base, tendremos resuelta la primera pieza del puzle: podemos llegar tranquilos a la relación sabiendo que nuestra pareja también la valora.
Nos planteamos cómo durar más en la cama por otro hecho, el hecho de que los ritmos sexuales son distintos, esto es: el hombre, fisiológicamente, tiende a excitarse con mucha mayor rapidez que la mujer.
Cómo Durar Más en la Cama
Para una relación sexual plena y satisfactoria, es necesario que esta sea valorada por ambas partes. Debemos ser capaces de aumentar nuestra autoestima y comprender que podemos ser unos buenos amantes. Para saber Cómo Durar Más en la Cama, no debemos recurrir a los métodos expuestos al principio porque aumentarán nuestra inseguridad, harán que sólo con ellos sintamos que podemos "durar" y nos impedirán disfrutar de la relación.
En lugar de recurrir a estos trucos del pasado debemos mejorar nuestra relación sexual.
Si la mujer tiene un ritmo sexual más lento que el de los hombres, la solución no pasa por retardar el de los hombres sino por dedicar más tiempo al calentamiento de la mujer.
- Hazte atractivo.
Recurre a ropa interior atractiva, perfumes, etc. La idea de esto es provocar el deseo previo en la pareja, estimular su imaginación mucho antes incluso del acto para que sea ella misma con su imaginación quien, sin ser consciente, vaya preparándose. - Busca la intimidad.
El estrés, las prisas, los miedos, etc., todos son malos compañeros en esta aventura. Debemos buscar el lugar y el momento para la relación, un lugar en el que ambos estemos cómodos y tranquilos. Para relajar, estimular y equilibrar los ritmos con la pareja es una buena idea recurrir a hacerle un masaje relajante-estimulante. - Cerciórate.
Puede que tras toda esta preparación, la mujer no esté preparada, que se sienta satisfecha con lo el estado en el que se encuentra y no quiera profundizar. No es buena idea intentar forzar la situación y buscar el coito, resulta mucho más productivo dejar que disfrute del momento y que este sirva para alimentar su deseo para futuros encuentros (la próxima vez estará más preparada) - Sin prisas.
El principal problema con que se encuentra el hombre es el sólo valorar en la relación el acto en sí. El hombre suele considerar que sólo triunfa cuando la pareja llega al orgasmo y que sólo puede llegar a él mediante el coito. Error: En una relación no siempre deben llegar los dos al orgasmo, en unas ocasiones lo hará uno y en otras otro, además, al igual que ocurre con los hombres, las mujeres también pueden llegar al orgasmo con masturbación. - Cuídate.
Tendemos a olvidar que sólo tenemos un cuerpo para pasar nuestra vida y no lo cuidamos lo suficiente. La realización regular de ejercicio, el control sobre lo que comemos, la reducción de determinados vicios, etc., nos proporcionarán un estado físico mejor y con más garantías de afrontar nuestra meta de cómo durar más en la cama además de aumentar nuestra autoestima.
